domingo, 17 de julio de 2016

Ella

Me duele el cuello.
Es como si lo tuviera cerrado.
     como si se hubiera hecho un tapón inexistente que oprime gritos y rabia,
                                                                                                          entre otras cosas.

Resulta que hoy he llamado a Atención con mis reivindicaciones atadas a piedras indoloras.
Me ha dicho que ya soy MAYOR, que no puedo parecer una niña,
y mi yo pequeña le ha empezado a decir de todo, pues se supone que debería saber quién soy y lo que me pidieron.

Al final ha decidido irse y ha cambiado por Gritos y más gritos porque yo sé del mundo y tú no.
No es del todo verdad, pero se entiende.

Gritos y más gritos, no ha parado; así que mi yo mayor ha cogido el coche, a mí, y me he ido.

Ido a un lugar donde puedo aflojar las cosas y permitir que circulen.
Sin Alarmantes,
sin Despertadores de profesión,
sin Atención,
sin pensadores sin pensamientos.

Solo yo entera, con zapatos cómodos e ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario